Quizas te encuentre
pasmada tras un espejo gelido
gris de desuso y miseria en remolino,
y liquidare las cuentas oxidadas
y te repatriare y
cuando te encuentre no voy a tratarte como a una dama
poesía te voy a tratar como se merece una de tu especie
amante inaudita y sabía, descorazonada ebria de belleza
en lupanares de Bukowski,
te voy a mostrar como se respeta a un herido
por el fuego del odio,
por la lagrima despreciada una calificación.
Te voy a enseñar poesía a tragar el barro
de tu belleza y perfección
a desnudarte de toda gramatica y pretensión detallista
o ritmica,
en un orgasmo te voy a arrodilar frente a mí
para que me desprecies y nunca
más deshijes el viento
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario